Y el primer premio va para la categoría de salud. Y sin duda la ganadora es Andrea Curtis con su libro “Eat This! How Fast-Food Marketing Gets You to Buy Junk (and how to fight back), Red Deer Press, 2018”.
Sorprendentemente, este libro representa un conjunto de herramientas de 36 páginas para luchar contra el marketing de comida chatarra para niños, con el respaldo de Mark Bittman y Jamie Oliver, entre otros.
Mientras se lee esta pieza informativa, se convierte en un manual efectivo para enseñar alfabetización alimentaria a los niños, enseñándoles a pensar críticamente sobre las diferentes formas en que las compañías de alimentos y bebidas tratan de manipular para que los niños compren sus productos o molestan a sus padres para que lo hagan.
Aunque únicamente se le dedica una página a la parte de enfermedades resultantes de una mala alimentación, es increíble la cantidad de proyectos que los niños tienen a disposición y que pueden hacer para despertar consciencia sobre el tema:
- Hacer pruebas de sabor con comida rápida y evaluarla con la misma hecha en casa. "¿Cuál es más deliciosa, más cara, más saludable? ¿Cuál crea la menor cantidad de desperdicio?”
- “Mira tu programa favorito... y marca la cantidad de veces que la publicidad de productos azucarados y ultraprocesados aparece durante el programa".
- "Rápido: piensa en todas las mascotas de comida rápida que conoces por nombre... ¿A quién van dirigidas las mascotas?"
Las ilustraciones son amigables para los niños como también lo es el texto. Supongo que esto podría traducirse (guardando por supuesto todo lo relacionado con derechos de autor y propiedad intelectual) y usarse fácilmente en todas las escuelas de Panamá con niños a partir de los 8 años. ¡Wao!, sería una gran idea, especialmente ahora que la industria de alimentos está bajo la lupa y busca a todas costa salirse con artimañas para cautivar y deleitar a ese mercado soñado de niños de 2do y 3er grado de escuela.