Tengo la dicha que durante los dos meses de cuarentena, he podido caminar diariamente alrededor de la casa, entre los carros y dentro del garaje… pero en un tramo suficiente para hacerlo todos los días sin fallar ni uno solo. Y al hacerlo así, pude tomar sol, respirar aire fresco y nunca sentirme encerrado.
La idea de caminar es fundamental: los humanos estamos hechos para movernos. Muchas de las enfermedades crónicas y los enormes gastos anuales de atención médica están asociados con la falta de actividad física. Y la inactividad ha estado de moda durante la pandemia.
Por eso, el llamado reciente de las autoridades para que la gente salga de sus casas y haga actividad física es oportuno. Caminar es una de las formas más fáciles de hacer ejercicios. No requiere equipo especial y brinda una amplia gama de beneficios para la salud.
Mejor salud cardiaca: caminar solo 30 minutos 5 veces por semana puede reducir el riesgo de enfermedad coronaria en un 20 por ciento.
Menos riesgo de muerte prematura: caminar un mínimo de 150 minutos por semana puede aumentar la vida útil entre 15 y 20 años.
Menos estrés: caminar 20 minutos diarios baja el nivel de hormonas del estrés, como el cortisol, reduciendo la ansiedad y evitando la depresión.
Vigilancia de peso corporal: caminar puede quemar entre 120-200 calorías en 30 minutos, dependiendo de la velocidad.
Mejor la salud mental: caminar ayuda a aumentar la liberación de las hormonas para sentirse bien, como la serotonina, la noradrenalina y la dopamina.
Mejor salud de articulaciones y huesos: caminar está relacionado con el aumento de la densidad ósea y el tamaño del hueso.
Previene la diabetes: caminar ayuda a aumentar la sensibilidad a la insulina porque mejora la capacidad de los músculos para absorber (exceso) de carbohidratos.
Estoy seguro que hay muchos otros beneficios relacionados con caminar. En lo personal, puedo compartir que caminar me ayudó a soportar la angustia de sentirme acorralado por la pandemia. Cada vez que caminaba, sudaba y hacía ejercicios, el cuerpo me lo agradecía. Ciertamente, es una forma natural en que podemos mantener la salud corporal y recobrar la sanidad mental.