Salud Pública

Existe una preocupación generalizada por el estado de la salud pública en el mundo. Y muchos panameños se preguntan también si hay algo que está motivando ese deterioro en nuestra población.

Yo tengo una hipótesis y es que la industria alimentaria tiene una alta cuota de responsabilidad en todo lo que está sucediendo. Es cierto que cada país tiene sus propios estándares sobre qué ingredientes y prácticas de producción considera seguros. Y parte de lo que se considera una práctica normal para la industria alimentaria se maneja de manera muy diferente según cada país. Así como hay una serie de ingredientes y aditivos alimentarios que están prohibidos en Europa pero no Estados Unidos y América Latina, también las tasas de enfermedades crónicas como el cáncer, las enfermedades cardíacas, la diabetes y la obesidad son más altas en algunos países que en otros.¿No será entonces que esos ingredientes son parte del problema?

Hay once (11) ingredientes alimentarios prohibidos en Europa que se utilizan ampliamente en los países americanos. Vamos a ver uno por uno.

#1 Acondicionadores de masa en la fabricación de pan.Los acondicionadores de masa, como el bromato de potasio y la azodicarbonamida, son productos químicos que se utilizan para mejorar la resistencia y la textura de la masa de pan. Se encuentran en panes blancos, bollos y panes de huevo. El bromato de potasio está clasificado como carcinógeno de categoría 2B y se sabe que su exposición causa sensibilidad respiratoria, como asma u otras dificultades respiratorias.

#2 Aceite vegetal bromado. El aceite vegetal bromado (BVO) fue patentado originalmente por empresas químicas como retardante de llama. Pero ahora, el BVO se puede encontrar en ciertas bebidas deportivas coloridas y refrescos con sabor a cítricos como emulsionante. Se acumula en el tejido humano, así como en la leche materna, y puede provocar pérdida de memoria con el tiempo. El bromo también compite con el yodo por los sitios receptores del cuerpo, lo que puede aumentar el riesgo de deficiencia de yodo, enfermedades autoinmunes e incluso ciertos cánceres.

#3 Propilparabeno. Se utiliza como conservante en tortillas, muffins, mezclas de frutos secos, pasteles, rollos de salchicha y más. Afecta el sistema hormonal y su exposición puede estar relacionada con el cáncer de mama. La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria prohibió en 2006 el uso de propilparabeno en los alimentos y en 2015 también lo prohibió en los productos cosméticos.

#4 BHA y BHT. Son antioxidantes artificiales que se utilizan en mezclas secas, cereales y productos de papa deshidratados para conservarlos y aumentar su vida útil. Estos son posibles carcinógenos y disruptores endocrinos, lo que significa que pueden alterar la función normal de las hormonas y provocar enfermedades.

#5 Colorantes sintéticos. Los fabricantes de alimentos utilizan colorantes sintéticos, como el azul 2, el amarillo 5 y el rojo 40, para mejorar el color de ciertos alimentos e ingredientes, y hacerlos más atractivos para los consumidores. Algunos alimentos que contienen estos colorantes incluyen bebidas como jugos, refrescos deportivos y sodas, además de dulces y glaseados utilizados en productos horneados y snacks. Incluso se usan en cosas tontas como hacer que la mostaza sea más amarilla, el salmón más rosado y los pepinillos encurtidos en frascos con el tono perfecto de amarillo verdoso.

#6 OGM. Los organismos genéticamente modificados (OGM) existen desde la década de 1980. Pero se han convertido en un tema controvertido y con razón. Si bien están muy extendidos en los Estados Unidos (la mayoría de la soja, la remolacha, el maíz, la canola, el algodón y la alfalfa son cultivos transgénicos), muchos países europeos los han prohibido o regulado debido a preocupaciones de seguridad pública. Una manipulación genética común implica alterar el ADN de ciertos cultivos para hacerlos resistentes a los herbicidas. Uno de los herbicidas más comunes utilizados junto con estos OGM es el glifosato, el principal ingrediente activo del herbicida Roundup. El consumo de glifosato está relacionado con el cáncer. De hecho, varias personas han ganado casos que alegan que el glifosato causó su cáncer. Bayer, el fabricante de Roundup, está luchando varias demandas que involucran a más de 10 mil personas.

#7 Roxarsona. El fármaco roxarsona, a base de arsénico, se utiliza habitualmente en pollos. La roxarsona se utiliza para aumentar el color rosado de la carne de pollo cruda, acelerar el crecimiento de las aves antes del sacrificio y prevenir los parásitos en el estómago del pollo. La exposición crónica al arsénico puede provocar anemia, lesiones cutáneas y daño renal, además de aumentar el riesgo de ciertos cánceres, abortos espontáneos y defectos de nacimiento.

# 8 Ractopamina. Es un potenciador muscular en cerdos, vacas y pavos. Y, al igual que otras sustancias nocivas utilizadas durante la cría de animales, no desaparece simplemente cuando se sacrifica al animal. Algo todavía queda en la carne que consumimos. La ractopamina está prohibida en 122 países, incluidos Rusia, China continental, Taiwán y muchos países de Europa. Esto se debe a que se ha relacionado con daños reproductivos y cardiovasculares en humanos, así como con cambios cromosómicos y de comportamiento.

# 9 Herbicidas, insecticidas y fungicidas. Estos agroquímicos se utilizan ampliamente en los cultivos del sistema alimentario para mantenerlos libres de insectos y enfermedades. De los 374 ingredientes activos autorizados para uso agrícola en países americanos, la Unión Europea prohibió 72 de ellos..

# 10 Olestra. Es un sustituto de grasa sin colesterol creado por Procter & Gamble. La FDA lo aprobó para su uso en alimentos en la década de 1990 y todavía se usa en ciertas papas fritas y papas fritas. Olestra puede provocar reacciones digestivas extremadamente desagradables, como diarrea e intestinos permeables. Su consumo excesivo también puede provocar deficiencias de vitaminas liposolubles A, D, E, K, así como de carotenoides. Tanto Canadá como el Reino Unido han prohibido el ingrediente.

# 11Hormonas sintéticas. Las hormonas sintéticas, como rBGH y rBST, se utilizan ampliamente en la industria láctea de Estados Unidos. La razón principal de esto es aumentar la producción de leche en las vacas lecheras. Sin embargo, la rBGH aumenta los niveles de IGF-1 en humanos y puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer. Además, las vacas tratadas con rBGH tienen más probabilidades de desarrollar mastitis, una infección de la ubre, que requiere tratamiento con antibióticos. Canadá, la UE y otros países han prohibido estos compuestos.

La pregunta que debemos hacer ahora es ¿qué puedo hacer para protegerme de estos ingredientes prohibidos? Si bien no podemos controlar inmediatamente lo que las empresas de alimentos ponen en sus productos, no tenemos que comerlos. Y hay medidas que puede tomar para elegir alimentos más sanos y seguros, dondequiera que viva.

Si tiene más preguntas, envíela a lifeblends@gmail.com.